31 Notificaron entonces a David: «Ajitófel está entre los conjurados
con Absalón», y David dijo: «¡Vuelve necios, Yahveh, los consejos de
Ajitófel!»
32 Cuando David llegó a la cima donde se postran ante Dios, le salió
al encuentro Jusay el arquita, amigo de David, con la túnica desgarrada y
cubierta de polvo su cabeza.
33 David le dijo: «Si vienes conmigo, me serás una carga.
34 Pero si tu vuelves a la ciudad y dices a Absalón: “Soy tu siervo, oh
rey mi señor; antes serví a tu padre, ahora soy siervo tuyo,” podrás frustrar,
en favor mío, los consejos de Ajitófel.
35 ¿No estarán allí contigo los sacerdotes Sadoq y Abiatar? Todo
cuanto oigas en la casa del rey, se lo comunicas a los sacerdotes Sadoq y
Abiatar.